El PBX Sailing Team, con Guillermo González a la caña, se ha clasificado en décimo tercera posición en el Mundial J80 organizad0 por el Monte Real Club de Yates de Baiona, que ha reunido a 77 tripulaciones con más de 400 regatistas procedentes de 43 países diferentes.
Este resultado es muy positivo teniendo en cuenta el altísimo nivel de todos los participantes y la juventud del proyecto, lo que les hace presagiar un futuro muy prometedor para el equipo. “Estamos muy contentos por los resultados y nos vamos con buenas sensaciones porque lo hemos dado todo y hemos demostrado que podemos competir con los mejores”, destacan.
De hecho, Palibex podría haber avanzado puestos en la clasificación si el viento les hubiera permitido competir el viernes y el sábado, tras una brillante penúltima jornada que les mantuvo hasta el final animados y con la esperanza de alcanzar la parte más alta de la tabla.
Y es que el Mundial J80 ha estado marcado por condiciones meteorológicas muy variables en el campo de regatas de las Islas Cíes, que han supuesto un auténtico reto para la organización. Prueba de ello es que solo han podido celebrarse 8 de las 15 mangas programadas por cancelaciones causadas por el exceso o la escasez de viento.
El PBX Sailing Team considera cumplidos sus objetivos por el aprendizaje que ha supuesto
medirse con los mejores del mundo de la vela y la importancia de haber defendido sus valores
sin perder en ningún momento la sonrisa. La ilusión por competir no solo ha desaparecido,
sino que cada vez va a más, así que el equipo ya está pensando en acometer nuevos retos.
Finalmente, el Palibex también celebra el éxito obtenido por otros equipos que competían bajo la grímpola del Real Club Marítimo de Santander. Es el caso del Eurofrits & Aviko, armado por el cántabro Daniel de la Pedraja y patroneado por el canario Javier Padrón, que se llevó la medalla de oro en la categoría absoluta, en la que también destacaron entre otros el Solintal, patroneado por Ignacio Camino, que quedó tercero y Fredo La Estrella del Norte, de Pichu Torcida, que fue séptimo. Mención especial merece también el Mercury Avator, armado y patroneado por el cántabro Jaime Piris, que se proclamó campeón del mundo en clase Máster.